Vistas a la página totales

martes, 6 de mayo de 2025

CUANDO UNA MASCOTA SE VA.

CUANDO UNA MASCOTA SE VA

 En nuestra casa acabamos de sufrir la perdida de nuestra perrita “Madison” una Gran Danés que era todo afecto, lealtad, nobleza, protección y compañía, mi hijo Zuriel fue lo único que pidió al terminar su carrera hace 5 años y al llegar a casa rápidamente nos encariñamos con ella, era la compañera de mi esposa y mis hijas y sobre todo con ellas les demostraba un amor incondicional y un apego que era admirable.

 Con mi hija Sarita siempre buscaba escabullirse a su cama y hacerle compañía, eran compañeras y cómplices, mi hija la quiere muchísimo, mi hija Michelle también la procuraba y entre las dos se encargaban de alimentarla y limpiar sus travesuras, lo único que pedía la perra era una caricia, con su tamaño enorme no se daba cuenta que no era un perrito Chihuahua, y sin embargo todos en mi familia y conocidos la querían por ser muy dulce con propios y extraños, muy protectora, por eso su ausencia se siente en mi familia, porque era parte de nosotros , eso es algo que debemos agradecer a Dios que nos permitió tenerla un tiempo, aunque todos sufrimos su ausencia y la extrañamos muchísimo, debemos entender que es parte de la vida sufrir la perdida de nuestras mascotas y de alguna manera dar gracias por tener la suerte de haber tenido una excelente perrita, eso nos permite valorar toda vida y por supuesto la de nuestro prójimo Muchos disfrutamos de la compañía de una mascota, ya sea perros, gatos, caballos o cualquier clase de animales, estos nos ofrecen compañía y en muchos casos un afecto y lealtad incondicional. En el caso de mi familia siempre hemos tenido muchos animales que forman parte de nuestra vida y sin caer en el error de humanizar a una mascota, estos son apreciados y queridos por nosotros. 

 Por eso cuando de acuerdo a su propia naturaleza y vida más corta los animales, inevitablemente mueren antes que nosotros su ausencia es motivo de tristeza, dolor y sentimiento de pérdida. No podemos menospreciar el dolor que provoca la pérdida de una mascota, pues no sabemos el bien que le hacía a esas personas que la extrañan y quisieron cuando estaba junto a ellos. Tampoco debemos caer en ideas absurdas como el panteísmo creyendo que todo participa de la divinidad y por tanto creer que los animales o los seres humanos reencarnan, eso es falso y contrario a lo que Dios nos ha revelado, el hombre los animales y plantas somos seres creados por Dios y si bien nuestra naturaleza es distinta, del único destino que podemos estar seguros es el de nuestra propia muerte.

 En ocasiones he leído absurdos debates sobre si los animales cuando mueren irán al cielo, debemos recordar que todos los seres vivos y las cosas materiales hemos sido creados por Dios y si bien el Padre Eterno ha hecho al hombre a su Imagen y semejanza (Gen 1,26), poniéndolo como el rey de la creación, eso no significa que no sean apreciadas por el Señor todas su obras y criaturas, pues él mismo vio que todo en su creación era bueno (Gen 1,25). Un deseo y sentimiento muy humano es reencontrarnos con nuestros seres queridos al termino de nuestra vida, y eso incluye en muchos casos el deseo de ver esos animalitos que fueron queridos y amados por nosotros, sin embargo nuestra fe debe centrarse en que nuestra vida eterna será colmada por la presencia de Dios y él tiene obviamente lo mejor para sus hijos, por ello creer que los “animales van al cielo” en el sentido de disfrutar la salvación como los seres humanos no es correcto, pues para empezar los animales no pueden ser “salvados” ya que no cometen pecados al ser criaturas irracionales, sin embargo no sabemos qué planes o destino tenga Dios para ellos en la vida eterna. Cristo vino a salvar al hombre del pecado, pero los animales no participaron de esa falta, aunque sufrieron las consecuencias al estar subordinados a los hombres. 

 El Catecismo de la Iglesia Católica señala en su numeral CEC #2416 Los animales son criaturas de Dios, que los rodea de su solicitud providencial (cf. Mt 6, 16). Por su simple existencia, lo bendicen y le dan gloria (cf. Dn 3, 57-58). También los hombres les deben aprecio. Recuérdese con qué delicadeza trataban a los animales san Francisco de Asís o san Felipe Neri. Así que Dios contempla un destino y providencia para los animales y el hombre quienes por siglos han convivido durante su paso por este mundo ¿Cuál es su destino final? No lo sé, eso lo dejo a los teólogos, la Iglesia nos enseña que se puede amar a los animales; pero no se puede desviar hacia ellos el afecto debido únicamente a los seres humanos. También la Iglesia nos dice que los animales han sido confiados a nuestra administración y se entiende a nuestro cuidado. CEC #2417 Dios confió los animales a la administración del que fue creado por él a su imagen (cf. Gn 2, 19-20; 9, 1-4). Por tanto, es legítimo servirse de los animales para el alimento y la confección de vestidos. Se los puede domesticar para que ayuden al hombre en sus trabajos y en sus ocios. 

Los experimentos médicos y científicos en animales son prácticas moralmente aceptables, si se mantienen en límites razonables y contribuyen a cuidar o salvar vidas humanas. El interés por los animales no ha escapado a muchos Santos que han demostrado su amor interés y preocupación por nuestros hermanos menores, San Francisco de Asís, San Juan Bosco, San Roque, San Antonio Abad y muchos más, nunca vieron mal en preocuparse por nuestros animalitos. 

 El Papa San Juan Pablo II compartió su amor por los animales con el mundo. Su amor por los animales lo demostró durante un discurso de 1990 citado por las Hermanas Misioneras Franciscanas del Sagrado Corazón cuando dijo: "los animales poseen un alma, y los hombres deben amar y sentir solidaridad con nuestros hermanos más pequeños". Finalmente la medida de todo es el amor, amar a nuestras mascotas nunca será malo, en la mayoría de los casos son seres que corresponden al ciento por uno al afecto y atención que les entregamos, muchos son capaces de dar su vida por protegernos o cuidarnos, dan un servicio inestimable a la humanidad y a nuestros hijos les pueden enseñar la responsabilidad de cuidar a un ser más débil y dependiente que ellos y en los casos en los que mueren también aprender sobre nuestro fin y destino.

 Para nosotros la perdida de nuestra “Madison” nos deja tristeza, pero a la vez agradecimiento con una perrita que nos demostró que el amor es incondicional y Dios nos la prestó para acompañarnos un trayecto de nuestra vida, sé que muchos entienden eso y debemos decirle a Dios siempre “hágase tu voluntad”. 

 Manuel Cuevas (Miles Christi) 

 Citas bíblicas sobre los animales: 

 Lucas 3,6 dice, "y toda carne verá la salvación de Dios". 

 Isaías 11,6-9 menciona a los animales en el cielo. 

 Eclesiastés 3,18-21 dice que los hombres y los animales tienen el mismo aliento y que el hombre no tiene una ventaja sobre los animales. También dice que hombre y los animales todos "irán a un lugar". 

 Lucas 12,6 menciona que ni los gorriones son "olvidado ante Dios".

 Apocalipsis 5,13 menciona a todas las criaturas alabando a Jesús 

 Salmo 50 "Porque mía es toda bestia del bosque, y los millares de animales en los collados. Conozco a todas las aves de los montes, y todo lo que se mueve en los campos me pertenece" 

 PD. 
Este artículo lo hice hace años, en el 2021 para ser precisos por la muertede nuestraperrita "Madison", lo publicaron en la página " Marchando Religion" pero al parecer ya no está activa y ayer "Luquitas" un perrito de mi cuñada Julia falleció y quisiera compartirle lo mismo que expresó aqui. Dios nos presta a nuestras queridas mascotas para aligerar el viaje y darnos amor incondicional. 

 Manuel Cuevas Ramírez (Mileschristimex)

miércoles, 20 de septiembre de 2023

CÓMO SER CATÓLICO CON HURACANES, INUNDACIONES Y TERREMOTOS Y NO MORIR EN EL INTENTO?

¿CÓMO SER CATÓLICO CON HURACANES, INUNDACIONES Y TERREMOTOS Y NO MORIR EN EL INTENTO? Hemos sufrido en México y en otros países hermanos varios desastres naturales y los medios de comunicación masivos le han dado una cobertura sin precedentes a los fenómenos naturales que afectan al hombre. En mi casa nos ha tocado sentir y sufrirlo sin llegar a los extremos en que miles de mis hermanos están padeciendo lo sucedido principalmente por los dos terremotos del 7 y del 19 de septiembre en México., un par de dias antes nuestra casa se inundó , solo perdidas materiales afortunadamente. Me he percatado que es en estos momentos cuando mucha gente demuestra de lo que está hecho y sobre todo de lo que reboza su corazón, he visto muestras de gran generosidad, de heroísmo, de sacrificio y entrega por miles de jóvenes que desinteresadamente ayudan y también he visto lo peor de los que aprovechan esto para lucrar, robar, corromper. Mucha gente es cuando recuerda que existe Dios, que si alguien puede hacer algo para remediar los males es el Señor,pero es difícil que alguien que no vive su fe y no la practica en la vida diaria pueda cambiar de la noche a la mañana, quien no se acerca al señor Jesús en la oración y los Sacramentos difícilmente podrá dar testimonio de lo que es un verdadero Cristiano, un verdadero Católico. Y me pregunto , estoy haciendo realmente las cosas por amor a Cristo, por amor al prójimo? Soy capáz de ver el rostro de Cristo en el pobre, el enfermo, el que nos cae mal, el que nos ofende? Hago las cosas porque se necesita y puedo contribuir o por que me señalan y halagan mi vanidad? Quizá muchos no piensan en esto,pero en lo personal trato de vivir mi día como si fuera el único que tengo y pienso, esto lo hago por amor al Señor que hizo muchísimo más por mí, al dar, al servir, al dejar de vernos como el centro del universo y poner al que realmente lo es entendemos que podemos ser coherentes con nuestra fe y participar de esa alegría, esa tranquilidad a los demás, y ya se que muchos piensan que me volví loco, mis residentes del hospital,mis pacientes,familiares y amigos no dudo piensen que estoy loco o que tomé algo,pero es simplemente que cada día estoy aprendiendo a que sea Cristo quien me guíe y me haga su instrumento y yo pobre herramienta no soy el que hace las cosas sino Jesús el verdadero Maestro. Cuando no lo dejo hacer y por el contrario me empecino de forma egoista a hacer las cosas a mi modo veo que todo sale mal, cuando acepto lo que Dios me ha mandado y lo bendigo puedo decir como el santo Job, "El Señor me lo dió, el Señor me lo quitó,bendito sea su Santo nombre" (Job 1,21) acaso no es en las pruebas que el hombre demuestra su valía? como hacer producir los talentos si los tenemos guardados y no los compartimos? Dice la Escritura "Por lo cual os regocijáis, / aunque ahora tengáis que entristeceros un poco / en las diversas tentaciones, para que vuestra fe probada, / más preciosa que el oro / que se corrompe, / aunque acrisolado por el fuego..." (1 Pe 1, 6-7). Como recuerdo al P. Salvador Cisneros , que nos decía "Los hombres que valen la pena son puestos a prueba en el crisol de las dificultades", y es cierto, somos probados por fuego,por los problemas de la vida diaria, a veces creemos que nuestros medio es el obstáculo, ya sea familia, trabajo, amigos, etc, la realidad es que el principal obstáculo somos nosotros mismos cuando no reconocemos nuestra pequeñez y necesidad de ser dignos y coherentes hijos de Dios. Dios todo lo puede,pero tenemos la suficiente fe para pedirlo? Cuando voy a Misa, cuando rezo el rosario, cuando hago algo debo hacerlo por amor a Dios ,vaciarme para que sea Cristo quien llene mi vida y le de sentido y cauce. De que forma puede hacer que otros amen a Dios, pues demostrandolo con mi propia vida, siendo buen esposo, buen padre, buen hermano y amigo , siendo responsable y fiel al Señor, cumplir los Mandamientos no por que se tenga miedo al castigo o se espere recompensa sino por que ansiamos satisfacer a nuestro amado Dios que nos ha dado todo. Tienes dificultades? Dios lo sabe Sientes que la vida no tiene sentido? Ya buscaste al que le dá sentido a todo? Piensas que tu solo puedes hacer todo en la vida?Una y otra vez caemos y solo nos levantamos por que Él nos sostiene. A que tenerle miedo sino a ofender a Dios? Te preocupas por que te digan algo de tu fe? Acaso no puedes sentirte orgulloso de ser hijo de Dios, seguidor de Cristo? Hoy son grandes las catástrofes que nos hacen reflexionar,pero a veces son pequeñas pruebas y hechos,ahí es donde debemos también demostrar que somos fieles hijos de Dios y de su Iglesia Católica. Así que sufres y te angustia y desespera lo que ves y padeces, pues ya no puedes caer más,levántate, tu Señor te espera con brazos amorosos, entrégate a Cristo, Él siempre nos espera en el Sagrario, en la Eucaristía, en la oración, en el Confesionario. Sigue los consejos de Nuestra Santa Madre la Virgen María, "Hagan lo que Él les diga " (Jn 2,5) así seguro sobrevives a cualquier cataclismo add: la imagen es de dominio público, no tengo los derechos de autor

lunes, 16 de enero de 2023

¿CÓMO AFRONTA UN CATÓLICO EL SUICIDIO?

¿COMO AFRONTA UN CATÓLICO EL SUICIDIO?
Hace poco una sobrina me preguntaba muy preocupada ¿Tío que pasa con los que se suicidan? Un amigo cercano a ella decidió quitarse la vida y uno debe de ser prudente y delicado para comentar, apoyar, pero también para decir la verdad de este problema que se da cada vez más en nuestra sociedad, pero sobre todo a la luz de nuestra fe. Los católicos sabemos que la vida es un don de Dios y que solo a Él corresponde poner fin a la misma, el Quinto Mandamiento dice “No Matarás”, por supuesto que incluye nuestra propia vida, la Iglesia siempre ha considerado que “el suicidio contradice la inclinación natural del ser humano a conservar y perpetuar su vida. Es gravemente contrario al justo amor de sí mismo. Ofende también al amor del prójimo porque rompe injustamente los lazos de solidaridad con las sociedades familiar, nacional y humana con las cuales estamos obligados. El suicidio es contrario al amor del Dios vivo” (CEC 2281). Hablando muy claro, el suicidio es un pecado mortal que pone en grave riesgo de condenación a quien lo comete, esto puede parecer inhumano, cruel, para quien no tiene fe y desconoce lo que Dios y la Iglesia enseñan al respecto, debemos aclarar algunas cosas. Dios nos ama eso es un hecho, pero también respeta nuestra libertad y quien decide quitarse la vida por cualquier medio está tomando la decisión de alejarse y apartarse de Dios, de tomar algo que no le pertenece y destruirlo. La Iglesia nos enseña a “no desesperar de la salvación eterna de aquellas personas que se han dado muerte. Dios puede haberles facilitado por caminos que Él solo conoce la ocasión de un arrepentimiento salvador. La Iglesia ora por las personas que han atentado contra su vida”(CEC2283). Es algo que solamente Dios sabe quién se salva y quien se condena, y la Iglesia nunca ha afirmado la condenación de una persona específicamente. Algo que debemos de saber, las tres condiciones para que exista un pecado mortal o grave es que exista pleno, conocimiento, pleno consentimiento y materia grave, por lo que se sabe y conoce actualmente sobre las personas que comenten suicidio están en un estado de fragilidad y trastorno mental que como enseña la Iglesia en el Catecismo “Trastornos psíquicos graves, la angustia, o el temor grave de la prueba, del sufrimiento o de la tortura, pueden disminuir la responsabilidad del suicida” (2282). Recuerdo que las personas que se suicidaban, no se podía realizar exequias y misas de cuerpo presente de acuerdo al código de derecho canónico antiguo (1917), esto ya no es así, con el nuevo Código de Derecho Canónico (1983) Siempre queda la posibilidad de dirigirse al ordinario cuando surja alguna duda respecto a la aplicación de la norma jurídica (cann. 1184 de 1983 § 2). La privación de las exequias eclesiásticas conlleva coherentemente la negación de cualquier misa exequial, es decir, de misas oficiadas públicamente con ocasión de las exequias. Esto no impide que, en tal caso, se celebren en privado misas en sufragio del difunto, que tiene tanta necesidad de la misericordia de Dios (cann. 1185 de 1983;Chiappetta, 1996, p. 308). Decía el antiguo Código de derecho canónico; 1240 *l. Están privados de la sepultura eclesiástica a no ser que antes de la muerte hubieran dado alguna señal de arrepentimiento: 1°Los notorios apóstatas de la fe cristiana. o los notoriamente afiliados a una secta herética o cismática o a la secta masónica u otras sociedades del mismo género. 2°- Los excomulgados o entredichos después de la sentencia condenatoria o declaratoria. 3°- Los que se han suicidado deliberadamente. (Cap III código de derecho Canónico 1917) «La doctrina católica reconocía en el suicidio una triple falta: un defecto de fortaleza moral, ya que el suicida cede ante la desventura; una injusticia porque pronuncia contra su persona una sentencia de muerte contra su propia causa y sin estar cualificado; una ofensa a la religión, ya que la vida es un servicio divino de cuyo cumplimiento nadie puede eximirse por su cuenta.» El nuevo Código omite en absoluto el problema de la exclusión por causa del suicidio. Según la opinión de psicólogos y psiquiatras, estas personas no son con plenitud responsables por los actos que cometen. Si eran católicos practicantes y no demostraron antes de morir un comportamiento escandaloso no se les niega el funeral católico (Janczewski, 1917, pp. 136-137) El Suicidio es un problema de salud a nivel mundial, se ha visto que va en aumento su tasa de incidencia, en México durante 2013 se reportó la tasa de suicidios por cada 100.000 habitantes en 4,9, mientras que en el 2018 incrementó a 5,2, según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) en México: en el caso de los hombres de 20 a 24 años, la tasa de muerte por esta causa por cada 100.000 habitantes es de 9,3. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera a ese fenómeno como un problema grave de salud pública generado por factores psicológicos, sociales, biológicos, culturales y ambientales (anualmente 800.000 personas se quitan la vida) pero en gran medida prevenible. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo define como “un acto deliberado por el que un sujeto se causa la muerte con conocimiento o expectativa de un desenlace fatal”. Este, va antecedido de la ideación suicida, que se refiere a la aparición de pensamientos y planes cuyo contenido está relacionado con terminar con la propia existencia. La OMS señala que en los últimos años la mortalidad por suicidio ha sido superior a la mortalidad total causada por guerra y homicidios, y las estimaciones realizadas indican que en 2020 las víctimas podrían ascender a 1,5 millones. En México, de 2012 a 2016, el número de suicidios aumentó en un 15% (de 5,550 a 6,370 casos, dados mayormente en la población masculina) Entre los temas más relacionados al suicidio se han detectado: la falta de oportunidades, las adicciones y la exposición a la violencia y al estrés Cerca de 75 por ciento de quienes se quitaron la vida tenían algún trastorno mental. Ocho de cada 10 personas que se suicidaron ya lo habían intentado antes y 70 por ciento comentaron sus intenciones con familiares, amigos y médicos. De haberse atendido, algunos se hubieran podido prevenir El suicidio constituye la segunda causa de defunciones en el grupo de 10 a 24 años y una de las principales causas de muerte entre los jóvenes a nivel mundial, solo después de los accidentes. Poco más de la mitad de las 6 mil 559 personas que se quitaron la vida en 2017 tenían de 15 a 34 años de edad. En relación con la edad, entre los 20 y los 29 años de edad se reportan las tasas más altas atribuibles principalmente a problemas familiares, amorosos, depresión, ansiedad, abuso de alcohol y consumo de drogas. En México los adolescentes es el segundo motivo de muerte de adolescentes que tienen entre 15 y 19 años de edad. Y la tercera si se considera hasta los 24 años, sólo detrás de los accidentes y homicidios, es el grupo más vulnerable por problemas relacionados con la depresión, la ansiedad, daño neurológico, consumo de sustancias adictivas y problemáticas económica y familiar. Las entidades con más incidencia de suicidio en jóvenes son Tabasco, Guanajuato, Coahuila, la Ciudad de México y Chihuahua. El aumento de suicidios de niños y adolescentes debe alertarnos como una señal de alarma, por las implicaciones sociales que representa. Quienes usan las redes sociales por más de dos horas al día tienden a presentar niveles más altos de ansiedad, depresión y mala calidad del sueño, así como ideación suicida (Royal Society of Public Health). Afecta desde adolescentes a adultos jóvenes porque desean estar en línea el mayor tiempo posible para no perderse nada, o tratan de satisfacer estándares poco realistas. Uno de cada tres millennials mexicanos sufre acoso o ciberbullying, lo que sube el estrés y la posibilidad de padecer depresión. Señalar también que series de televisión o programas de la web o redes sociales han tenido su parte en aumentar la tasa de suicidio entre adolescentes, como lo dice un estudio de la Journal American Medic Asociation Psiquiatric, en relación a series como “Trece razones por las cuales” (13 Reasons Why) la cual fue muy criticada por asociaciones de salud mental en el mundo, debemos estar muy alertas , pendientes de la mala información y educación sea la fuente que sea, va de por medio la salud mental de nuestros hijos. Cerca de 75 por ciento de quienes se quitaron la vida tenían algún trastorno mental. Ocho de cada 10 personas que se suicidaron ya lo habían intentado antes y 70 por ciento comentaron sus intenciones con familiares, amigos y médicos. De haberse atendido, algunos se hubieran podido prevenir Entre los factores de protección contra el suicidio cabe citar una alta autoestima y unas relaciones sociales ricas, sobre todo con los familiares y amigos, el apoyo social, una relación estable de pareja y las creencias religiosas o espirituales. La pronta identificación y el tratamiento adecuado de los trastornos mentales son una importante estrategia preventiva. Asimismo, existen datos que demuestran que la formación del personal de atención primaria en la identificación y el tratamiento de las personas con trastornos del estado de ánimo puede hacer disminuir los suicidios entre los grupos de riesgo. SIGNOS DE ALERTA 1. Si la persona presenta fantasías o ideas de muerte, es necesario acudir a una terapia psicológica y posible valoración psiquiátrica. 2. Si la ideación suicida es persistente o si ya existe un plan de acción, es imperativo realizar un internamiento psiquiátrico para poder evaluar y tratar al paciente de cerca. 3. Ante un intento suicida, tras la intervención médica urgente, es necesario dar continuidad a una supervisión psicológica y psiquiátrica, así como una óptima contención y guía familiar. 4.-Hacer oración, acercarse a los Sacramentos, las gracias espirituales que proporcionan pueden ayudar a quienes han perdido el rumbo y el sentido de su vida, Dios no los abandona. 5.-Debemos acudir a personas preparadas y calificadas para atender profesionalmente estos casos, por mucha buena voluntad que tengamos lo mejor es que alguien que sepa de esto trate a las personas con intentos o ideas suicidas. 6.-Debemos hacer mucha oración por quien tiene esos pensamientos suicidas y acompañarlos con caridad y firmeza, y apoyar a las familias, acudir a Dios y a la intercesión de la Virgen María puede ser la diferencia ya no se diga entre la vida y la muerte únicamente, sino entre la salvación y la condenación eterna de las almas. Dios nos guarde y permita perseverar en su gracia. Manuel Cuevas Miles Christi. FUENTES: 1.-https://www.who.int/mediacentre/news/releases/2004/pr61/es/?fbclid=IwAR363MaTbzKr_XUv_oiLU6e4EbyAK2j-WRQcaXj_JesZIjPyMfUFljZGEIA 2.- https://www.infobae.com/america/mexico/2019/09/10/suicidio-la-segunda-causa-de-muerte-en-mexico-en-jovenes-de-15-a-19-anos-de-edad-pero-solo-un-hospital-especializado-pediatrico-en-el-pais/?fbclid=IwAR2lJ5rWk9OEQ9kKZMMgwy9vSDdJbP1UDA2bK4m0bcJxW-wTb_YjW0XIo94 3.- https://www.milenio.com/opinion/carlos-guizar/columna-carlos-guizar/el-suicidio-en-mexico?fbclid=IwAR2VoblCAYHg9t2ZFpca5XAR1X01Wq1DwQ6mRnRedYiwcqMSK2VkjsX_Z0o 4.- https://www.milenio.com/estados/suicidio-problema-salud-publica-creciente-laguna?fbclid=IwAR1cp3ovDyXfg8IowYy2grepK5CZjxHHOhowE6dUt20ZVwGElSvM_K78N-I 5.- En México el Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por Teléfono (SAPTEL ) ofrece atención telefónica las 24 horas del día en el número: 0155 5259-8121. En los Estados Unidos se puede marcar al +1-888-628-9454. 6.- En Estados Unidos, existe la Red Nacional de Prevención del Suicidio para pedir ayuda, al 1-888-628-9454puedes o llamar al 1-800-273-8255, la línea del Servicio Nacional de Prevención del Suicidio, para hablar con alguien que te brindará apoyo gratuito y confidencial las 24 horas del día, los siete días de la semana. 7.- CONADIC: 01800 710 0900 Instituto Nacional de Psiquiatría (INPRFM): 56552811, 41605000 Centros de Integración Juvenil (CIJ) CDMX: 52121212 Call Center UNAM: 56222288 SAPTEL: 01 800 472 78 35 ó 52598121 (24 hrs.) 001880 273 8255 con opción en español (tiene costo) 8.- https://m.excelsior.com.mx/nacional/las-muertes-de-la-tristeza-las-cifras-del-suicidio-en-mexico/1335558?fbclid=IwAR363MaTbzKr_XUv_oiLU6e4EbyAK2j-WRQcaXj_JesZIjPyMfUFljZGEIA 9.-“El Vértigo del Suicidio”,Joël Pralong, Editorial San Pablo. 10.- http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p3s2c2a5_sp.html 11.- https://desdelafe.mx/opinion-y-blogs/preguntale-al-padre/el-suicidio-es-pecado-un-sacerdote-nos-explica/?fbclid=IwAR3b-otDILrUtS6RoYoDz3Lxc1F9t1so347VzQGICWdZB5dM-YyAwwvflXQ 12.- https://es.catholic.net/op/articulos/9168/cat/341/todos-los-suicidas-se-van-al-infierno-que-dice-la-iglesia-catolica-sobre-el-suicidio.html?fbclid=IwAR2wPtHFEcELDFT-emdMPGsCY4KJ0tIW3gyLNsqlUmbw3FklM78ErMSpoZQ 13.- https://jamanetwork.com/journals/jamapsychiatry/fullarticle/2734859?guestAccessKey=dd50899b-1af3-464a-af48-050ff6b6139d&utm_source=For_The_Media&utm_medium=referral&utm_campaign=ftm_links&utm_content=tfl&utm_term=052919&fbclid=IwAR3RNOcT4vlAEOGcmn1N4T3Y_xRxjLCzkk-Sq8TfHYK-NO5f8DRPLKHRZnc 14.- https://cnnespanol.cnn.com/2019/05/29/aumento-del-suicidio-ocurrio-entre-adolescentes-y-preadolescentes-despues-de-13-reasons-why-dice-estudio/?fbclid=IwAR1vBKB5zwe5hop0e9_1D9uiXO5NiCzZsHZa0g90Nw2XrFq5hvUrYxizhEI 15.- https://cnnespanol.cnn.com/2019/06/03/en-argentina-el-suicidio-es-la-segunda-causa-de-muerte-en-adolescentes/amp/?__twitter_impression=true&fbclid=IwAR2Z_h-BBVuTWUcDL_vIGeFXF0HXu7hY64kKAQZvMuw7SSh8KdsKCRpA-1g

viernes, 18 de noviembre de 2022

ROSARIO EN LATÍN

¿TE ANIMAS A REZAR EL ROSARIO EN LATÍN? Ya próxima la festividad de la Virgen del Carmen, siempre me he considerado hijo de la Virgen y de las cosas que puedo ofrecerle además de portar casi toda mi vida el escapulario es rezarle el Rosario a nuestra Madre Santísima. Me gusta rezarlo en latín por varios motivos, el primero es el idioma oficial de la Iglesia Católica, y al igual que en una familia donde existe un lenguaje coloquial e íntimo , el latín representa eso para los católicos, nos da universalidad e identidad, segundo porque así lo rezó Santo Domingo de Guzmán cuando recibió el encargo de la Virgen María de rezarlo y tantos santos, mártires y católicos que por siglos lo hemos rezado y que seguramente seguiremos haciéndolo si ponemos un poco de interés, es nuestra herencia y tradición. ¿Cómo se reza en latín? Igual que en Español o en cualquier otro idioma, solo que aquí les puse las oraciones como se dicen en Latín, ofrécelo a la Virgen que en estos tiempos convulsos interceda por la Iglesia para que no se aparte de la ortodoxia católica y no se pierdan las almas por malos pastores que tratan de destruir lo que Dios sostiene, pero que pueden hacer mucho daño esos lobos vestidos de ovejas y pastores, para que la Virgen María nos cubra bajo su manto. PER signum Crucis + de inimicis nostris + libera nos, Deus noster +. + In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen. CONFITEOR Confiteor (Acto de contrición) Deo omnipotenti, beatae Mariae semper Virgini, beato Michaeli Archangelo, beato Ioanni Baptistae, sanctis Apostolis Petro et Paulo, et omnibus Sanctis, quia peccavi nimis cogitatione, verbo et opere: mea culpa, mea culpa, mea maxima culpa. Ideo precor beatam Mariam semper Virginem, beatum Michaelem Archangelum, beatum Ioannem Baptistam, sanctos Apostolos Petrum et Paulum, et omnes Sanctos, orare pro me ad Dominum Deum nostrum. Amen. PATER NOSTER Pater noster, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen. AVE MARIA Ave Maria gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. GLORIA GloriaPatri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen JACULATORIA Maria mater gratia,mater misericordiae, tu nos ab hoste protege et hora morte suscipe. ORATIO FATIMA O mi Iesu, dimitte nobis debita nostra, libera nos ab igne inferni, conduc in caelum omnes animas, praesertim illas quae maxime indigent misericordia tua. CREDO Symbolum Apostolorum (Credo de los Apóstoles) in Deum Patrem omnipotentem, Creatorem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, Filium eius unicum, Dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, mortuus, et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, inde venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectionem, vitam aeternam. Amen. MEDITATIONES ROSARII (Meditaciones del Santo Rosario) I. MYSTERIA GAUDIOSA (Misterios Gozosos- lunes y sábado ) Primo, Beátæ Maríæ Vírginis anuntiatiónem contemplámur, et humílitas pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Secundo, Beátæ Maríæ Vírginis visitatiónem contemplámur, et charitas ad fratres pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Tertio, Dómini Nóstri Iésu Chrísti nativitátem contemplámur, et paupertátis spíritus pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quarto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti presentatiónem in templo contemplámur, et obediéntia pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quinto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti inventiónem in templo contemplámur, et Déum inquæréndi volúntas pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria , et Oratio Fatima) II. MYSTERIA DOLOROSA (Misterios Dolorosos- martes y viernes) Primo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti oratiónem in horto contemplamur, et dólor pro peccatis nostris pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Secundo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti flagellatiónem contemplamur, et córporum nostrórum mortificátio pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Tertio, Dómini Nóstri Iésu Chrísti spinis coronationem contemplamur, et supérbiæ mortificatio pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quarto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti crucis baiulatiónem contemplamur, et patiéntia in tribulatiónibus pétitur (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quinto, Dómini Nóstri Iésu Chrísti crucifixiónem et mortem contemplamur, et súi ipsíus donum ad animárum redemptiónem pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) III. MYSTERIA GLORIOSA (Misterios Gloriosos- miércoles, y domingo) Primo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti resurrectiónem contemplamur, et fídes pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Secundo, Dómini Nóstri Iésu Chrísti in cælum ascensiónem contemplamur, et spes pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Tertio, Spíritus Sáncti descensiónem contemplamur, et cháritas ad Deum pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quarto, Beátæ Maríæ Vírginis in cælum assumptiónem contemplamur, et bene moriéndi gratia pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) Quinto, Beátæ Maríæ Vírginis coronatiónem contemplamur, et fidúcia in María Regína Nostra pétitur. (Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et Oratio Fatima) IV. LUCIS MYSTERIA (Misterios luminosos-Jueves) Primo, Iesus in Baptismate apud Iordanem (Pater Noster,10 Ave maría,Gloria et Oratio Fatima) Secundo,In ipsius autorevelatione apud Canense matrimonium (Pater Nopster, 10 Ave María, Gloria et oratio Fatima) Tertio,In Regni Dei proclamatione coniuncta cum invitamento ad conversionem (Pater Noster, 10 Ave María,Gloria et oratio Fatima) Quarto, Transfiguratio Iesuchristi super montem Tabor(Pater Noster, 10 Ave María, Gloria et oratio Fatima) Quinto, In Eucharistiae institutione , quae nempe sacramentalis est paschalis mysterii declaration (Pater Noster, 10 Ave María , Gloria et oratio Fatima) ORATIONES AD FINEM ROSARII DICENDAE (Oraciones al finalizar el Rosario) MEMORARE (Acordaos) Memorare, O piissima Virgo Maria, non esse auditum a saeculo, quemquam ad tua currentem praesidia, tua implorantem auxilia, tua petentem suffragia, esse derelictum. Ego tali animatus confidentia, ad te, Virgo Virginum, Mater, curro, ad te venio, coram te gemens peccator assisto. Noli, Mater Verbi, verba mea despicere; sed audi propitia et exaudi. Amen. SUB TUUM PRAESIDIUM Sub tuum praesidium (Bajo tu amparo) confugimus, Sancta Dei Genetrix. Nostras deprecationes ne despicias in necessitatibus nostris,sed a periculis cunctislibera nos semper, Virgo gloriosa et benedicta. Amen. MAGNÍFICAT Magnificat ánima mea Dóminum. Et exultávit spíritus meus: in Deo salutári meo. Quia respéxit humilitátem ancíllae suae: Ecce enim ex hoc beátam me dicent omnes generatiónes. Quia fécit mihi mágna qui pótens est: et sánctum nómen eius. Et misericórdia eius in progénies et progénies timéntibus eum. Fécit poténtiam in bráchio suo: dispérsit supérbos mente cordis sui. Depósuit poténtes de sede: et exaltávit húmiles. Esuriéntes implévit bonis: et dívites dimísit inánes. Suscépit Ísrael púerum suum: recordátus misericórdiae suae. Sicut locútus est ad patres nostros: Ábraham, et sémini eius in saecula. Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto, Sicut erat in princípio, et nunc, et semper, et in sæcula sæculórum. Amen. SALVE Salve Regina, Regina, mater misericordiae, vita, dulcedo, et spes nostra, salve. Ad te clamamus exsules filii Hevae. Ad te suspiramus, gementes et flentes in hac lacrimarum valle. Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos misericordes oculos ad nos converte. Et Iesum, benedictum fructum ventris tui, nobis post hoc exsilium ostende. O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria. Amen. V. Ora pro nobis, sancta Dei Genetrix.R. Ut digni efficiamur promissionibus Christi. Oremus Omnipotens sempiterne Deus, qui gloriosae Virginis Matris Mariae corpus et animam, ut dignum Filii tui habitaculum effici mereretur, Spiritu Sancto cooperante, praeparasti: da, ut cuius commemoratione laetamur; eius pia intercessione, ab instantibus malis, et a morte perpetua liberemur. Per eundem Christum Dominum nostrum. Amen. LITANIAE LAURETANAE -Kyrie, eleison. R. Kyrie, eleison. -Christe, eleison. R. Christe, eleison. -Kyrie, eleison. R. Kyrie, eleison. -Christe, audi nos. R. Christe, audi nos. -Christe, exaudi nos. R. Christe, exaudi nos. -Pater de caelis Deus,R. miserere nobis. -Fili Redemptor mundi Deus, R. miserere nobis. -Spiritus sancte Deus, R. miserere nobis. -Sancta Trinitas, unus Deus, R. miserere nobis. Sancta Maria, (Ora pro nobis) Sancta Dei Genetrix, Sancta Virgo virginum, Mater Christi,R. ora pro nobis. Mater Ecclesiae, Mater Divinae gratiae, Mater purissima, Mater castissima, Mater inviolata Mater intemerata, Mater amabilis, Mater admirabilis, Mater boni Consilii, Mater Creatoris, Mater Salvatoris, Mater Eucaristiae, Virgo prudentissima, Virgo veneranda, Virgo praedicanda, Virgo potens, Virgo clemens, Virgo fidelis, Speculum iustitiae, Sedes sapientiae, Causa nostrae laetitiae, Vas spirituale, Vas honorabile, Vas insigne devotionis Rosa mystica, Turris Davidica, Turris eburnea, Domus aurea, Foederis arca, Ianua caeli, Stella matutina, Salvationis arca, Mystica civitas Dei, Adoratrix perpetuam Iesus Eucaristiae, Salus infirmorum, Refugium peccatorum, Consolatrix afflictorum, Auxilium Christianorum, Corredemptora humani genus. Mediatrix omnia gratiarum. Terror daemonium, Exterminatrix omnia heresiae Regina Immaculata, Regina Angelorum, Regina Patriarcharum, Regina Prophetarum, Regina Apostolorum, Regina Martyrum, Regina Confessorum, Regina Virginum, Regina Sanctorum omnium, Regina sine labe originali concepta, Regina in caelum assumpta, Regina Sanctissimi Rosarii, Regina clerici, Regina Ecclesiae, Regina familiae, Regina pacis, Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,R. parce nobis, Domine.Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,R. exaudi nobis, Domine.Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,R. miserere nobis. V. Ora pro nobis, Sancta Dei Genetrix,R. Ut digni efficiamur promissionibus Christi. Oremus Concede nos famulos tuos, quaesumus, Domine Deus, perpetua mentis et corporis sanitate gaudere: et gloriosa beatae Mariae semper Virginis intercessione, a praesenti liberari tristitia, et aeterna perfrui laetitia. Per Christum Dominum nostrum.R. Amen. + In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen. Espero que recemos todos el Rosario, y pidamos por las ánimas benditas del purgatorio y las necesidades de la Iglesia. LAUS DEO VIRGINIQUE MATRI Manuel Cuevas Miles Christi.

martes, 25 de octubre de 2022

KENOSIS

KENOSIS. Por Miles Christi Cristo Jesús el cual existía en la forma de Dios No exigió tener la gloria debida a su divinidad Se anonado a sí mismo tomando la forma de siervo de Dios Y se asemejó a todos los hombre en su condición. Haciéndose hombre ,se humilló se hizo obediente ,hasta morir en la cruz hasta morir en la cruz. Por eso Dios en forma admirable a Cristo exaltó Y le otorgo un nombre tan alto que a todo excedió Para que así el cosmos entero se centre en Jesús. Él es el Señor que a todos conduce al Padre Amen (Himno Pascual o Cristológico) ¿Qué es la Kenosis? Es un concepto cristológico que tiene su raíz y su base bíblica en Flp 2,7. se dice de Jesucristo que «se vació a sí mismo» (heauton ekénosen), asumiendo la forma de vida humana que es propia de los demás hombres y haciéndose obediente al Padre hasta la muerte de cruz. Significa por tanto el «vaciamiento» de sí que realizó el Hijo de Dios insertándose en la historia de los hombres, hasta pasar por la experiencia de la muerte de cruz. Este acontecimiento ha sido interpretado en diversos sentidos por la tradición teológica. En las Sagradas Escrituras, San Pablo en su carta a los Filipenses(2,5-11)nos escribe lo siguiente: "Tened los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús, el cual, como existiera en forma de Dios, no creyó deber retener el ser igual a Dios, sino que se despojó a sí mismo, tomando la forma de siervo y haciéndose semejante a los hombres. Y mientras en su exterior aparecía como hombre, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó un nombre sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús se doble la rodilla de cuantos habitan en los cielos, en la tierra y en los abismos y toda lengua confiese:que Cristo-Jesús es el SEÑOR para gloria de Dios Padre". En el texto original griego dice el versículo 7: "ἀλλὰ ἑαυτὸν ἐκένωσεν μορφὴν δούλου λαβών, ἐν ὁμοιώματι ἀνθρώπων γενόμενος· καὶ σχήματι εὑρεθεὶς ὡς ἄνθρωπος" donde ἐκένωσεν (Ekenosen-Kenosis) es vaciamiento,abajamiento,anonadarse,despojarse de la condición divina de Jesucristo De acuerdo con la teología católica, el abajamiento de la Palabra consiste en la asunción de la humanidad y el simultáneo ocultamiento de la Divinidad. El abajamiento de Cristo es visto primero como su autosujetamiento a las leyes humanas del nacimiento y crecimiento y a la bajeza de la naturaleza humana caída. En Su abajamiento, Su semejanza con la naturaleza caída, no implica pérdida de justicia ni santidad, sino solamente las dolencias y penalidades aparejadas a tal pérdida. Ello afecta al cuerpo y al alma, y consiste en la posibilidad de sufrir por causas internas y externas. En el cuerpo, la dignidad de Cristo excluyen alguna dolencias y estados. El poder preservante de Dios que habitaba el cuerpo de Cristo, no permitió ninguna corrupción y le previno de enfermedades, inicio de la corrupción. La santidad de Cristo no era compatible con la descomposición tras la muerte, que es la manifestación del poder destructivo del pecado. De hecho, Cristo tuvo el derecho de liberarse de todo dolor corporal, y Su humanidad habría tenido el poder de quitar o suspender los efectos de las causas del dolor. Pero El libremente se sujetó a Sí mismo a muchos de los dolores resultantes de la ejercitación del cuerpo e influencias externas adversas como fatiga, hambre, heridas, etc. Siendo que éstas molestias tenían suficiente razón en la naturaleza del cuerpo de Cristo, le eran naturales a El. También Cristo retuvo El las debilidades del alma, las pasiones de Su razón y apetitos sensitivos, pero con las siguientes restricciones: (a) Emociones desordenadas y pecaminosas son incompatibles con la santidad de Cristo. Solamente pasiones sin culpa moral como temor, tristeza y el compartir en el alma de los sufrimientos del cuerpo son compatibles con Su Divinidad y perfección espiritual. (b) Aún el origen , intensidad y duración de esas emociones estaban sujetas al libre parecer de Cristo. Además, El podía prevenir los efectos disturbantes de tales pasiones sobre Su las acciones de Su alma y paz mental. En el Nuevo Testamento se dan también algunos otros pasajes además de Flp 2,7, en donde se hace referencia más o menos explícita a la abnegación, hasta su vaciamiento, del Hijo al entrar en nuestra historia: cf. Jn 1,14, donde el término sarx/carne indica a la humanidad en su fragilidad, transitoriedad Y mortalidad; Gál 4,4: el Hijo preexistente de Dios nació de una mujer y se sometió a la ley; Jn 17 5: el Hijo vive ahora en una situación, donde está privado de aquella gloria que poseía desde toda la eternidad; 2 Cor 8,9: el Hijo era rico, pero se ha hecho pobre (eptócheusen) para enriquecernos a nosotros. Una lectura comparativa de estos pasajes puede ayudarnos a leer con exactitud el contenido de Flp 2,7, que de hecho ha sido y sigue siendo interpretado de manera distinta por los exegetas. Algunos han visto el «vaciamiento» kenótico del Hijo eterno de Dios en su misma bajada en carne/naturaleza humana (como se verá, algunos Padres prefirieron esta interpretación); otros lo han visto en el hecho de que el Hijo de Dios preexistente ha entrado en el mundo y ha asumido la naturaleza humana renunciando a vivir en ella en la condición de gloria y de esplendor que habría de esperarse del Hijo divino y que de hecho se le dio en la resurrección (así piensan la mayor parte de los exegetas de nuestros días); otros finalmente han visto la kénosis en el hecho de que el hombre Jesucristo (no el hijo de Dios preexistente) recorrió un camino de humillación, de sufrimiento, de muerte, de cruz, que desembocó posteriormente con la resurrección en una situación de gloria. Del contexto inmediato de Flp 2,7 y del contexto remoto que nos ofrecen los otros pasajes bíblicos que hemos recordado se deduce que el concepto de «vaciamiento» más aceptable es el segundo: debe verse en la opción del Hijo eterno de Dios de hacerse hombre y de vivir como los demás hombres en la humildad de la condición humana, con su carga de limitaciones, sufrimientos y de muerte, antes de pasar a la situación gloriosa en que se encuentra con y después de su resurrección de la muerte. La kénosis del Hijo no consiste en la encarnación en sí misma, sino en su encarnación en la debilidad, hizo cercano a nosotros e imitable por nosotros (cf. Flp 2,5) Y fue esta kénosis la que el Padre sucesivamente en una situación de existencia humana gloriosa, premió su obediencia hasta la cruz. (Cf. Flp 2,8-11). La época patrística advirtió temprano el problema de la kénosis del apriori cultural helenista del carácter absoluto y de la inmutabilidad de lo divino y de la suma entre la esfera del espíritu y la de la materia y la corporeidad le hacía difícil admitir el vaciamiento radical del Logos divino mediante la asunción de una realidad humana finita, temporal, pasible, mortal. Pero el instinto de la fe hizo superar a la Iglesia de los Padres las dificultades que procedían de su contexto cultural y le permitió permanecer fiel al dato bíblico le imponía con todo su contenido desconcertante. Encontramos un eco del ánimo de la Iglesia patrística en la confesión de la verdad bíblica de kénosis de Cristo en un pasaje del concilio de Éfeso, inspirado en san Cirilo de Alejandría: «Afirmamos que el Logos/Hijo se hizo hombre de un modo inexplicable e incomprensible, uniendo a su hipóstasis la carne animada por un alma racional» (DS 250). San León Magno en el Tomus a Flaviano, patriarca de Constantinopla, habla expresamente de la exaninatio del Logos y la ve en su asunción de la «forma del siervo», de la «debilidad» de este mundo (cf. DS 293; 294). En este texto surge una perspectiva de la kénosis, característica de la reflexión de muchos Padres, pero que está ausente del dato bíblico: la bajada misma del Hijo divino asumiendo la naturaleza humana, en cuanto creada y finita, se ve como un rebajamiento, como un vaciamiento. La clarificación de la unión de lo divino con lo humano en Cristo en el plano de la hipóstasis/persona, que se realizó especialmente en el concilio Constantinopolitano II (553), y la consiguiente concreción de las normas de la «communicatio idiomatum» (es significativa la controversia sobre la afirmación de unos monjes escitas: «Unus de Trinitate passus est in carne», considerada como herética por los teólogos orientales, pero ortodoxa para el Constantinopolitano II: (cf. DS 432) condujo a una comprensión cada vez más exacta del vaciamiento del Hijo en su encarnación. Por no haber valorado esta conquista del pensamiento de los Padres, que hizo substancialmente suya la gran Escolástica, algunos teólogos, sobre todo del área de la Reforma, comenzaron a representar la kénosis de maneras y formas que constituyen de hecho, en diversas medidas, una eliminación del dogma cristológico. La kenosis, acción de despojarse o de humillarse a sí mismo, se convierte en el modelo de la conducta cristiana: humildad, servicio, abnegación, sacrificio, caridad fraterna, disponibilidad, amor a la pobreza. En este sentido la entendie­ron los primeros Padres de la Iglesia y late en la espiritualidad y en la ascesis de los cristianos. Por eso Jesús es el modelo. Y El mismo multiplicará sus alusiones a la humildad, según los relatos evangélicos: "No hagáis como los escribas y fariseos, que buscan los primeros puestos. Vosotros elegid los últimos. Y cuando venga que el que os ha invitado, dirá: Sube más alto" (Lc. 14.10). "El que quiera ser mayor entre vosotros, que se haga vuestro siervo". (Mt. 23. 11) El modelo de esa humildad es para el cristiano el mismo Cristo, quien cambió en la encarnación la forma de Dios por la forma de siervo. "El hijo del hombre no ha venido a ser servido sino a servir" (Mc. 10.45). Es el misterio de su vida. El, según ese mensaje profundo del Evangelio, ha venido a servir, ha pasado voluntariamente de "Dios en forma de Dios", a "Dios en forma de siervo." Eso es la "Encarnación". Es importante advertir que la humillación y los términos con que se expresa no son meras metáforas. Son realidades profundas del mensaje cristiano. Sin entender esta realidad no se puede ni presentar, ni entender, ni asumir, ni hacer vida el mensaje evangélico de la humillación del Verbo de Dios. El cristianismo no es una religión de destrucción, sino de construcción y transformación. La kenosis no es el final de todo, no es una destrucción masoquista de la vida, de la ener­gía, de la dignidad, de la libertad, como Nietzsche interpretó el mensaje cristiano y rechazó patológi­camente en sus obras, sobre todo en "Así habló Zarat­hustra" o en "Humano, demasiado hu­mano". El mensaje cristiano reclama ver la kenosis desde la óptica de la apoteosis. "Por lo cual el Señor Dios le ensalzó y le dio un nombre superior a todo nombre, para que ante El se doble toda rodilla en el cielo, en la tierra y en los infiernos". La exaltación de Jesús, la resurrec­ción y glorificación, es la recompensa a su humillación, a su "obediencia hasta la muerte y muerte de cruz". Dios le ensal­zó en su natu­raleza humana, por encima de todos los seres creados. Le confirió el nombre de Kyrios, Señor, Dominador. Y ordenó que todas las criaturas le rindan adora­ción como a Persona divina. En virtud de esta elevación, la naturaleza humana de Cristo entró a participar en su vida posterrena de la ma­jestad y gloria de Dios (Jn. 17. 5). Y más que recompensa, hay que ver en esa apoteo­sis un reconocimiento de la naturaleza divina de Jesús. "De ellos [de los israelitas], según la carne procede Cristo, que está por encima de todas las cosas, y es Dios bendito por los todos los siglos" (Rom. 9, 5) El sentido de la humillación encarnacional de Cristo hay que entenderlo en la perspectiva del pleno reconocimiento de su divinidad: "Nosotros aguardamos la feliz esperanza y la manifestación de la gloria de nuestro gran Dios y Redentor Jesucristo". (Tit. 2. 13); Precisamente por eso los cristianos reconocemos a Jesús como Señor y le denominamos continuamente con ese término, expresión de su soberanía divina. Los primeros cristianos trasladaban el sentido de "Señor", que usaban los romanos con relación al César como Señor" de la tierra, a Jesús, el Señor del cielo. Los emperadores romanos se adjudicaban el título de Kyrios, ordenando que se les tributaran honores divinos. Los judíos ya aplicaban a Dios este nombre de Kyrios, versión de los nom­bres hebreos de Dios: Adonai y Shaddai. Conceptos como Soberano, Dominador, Rey, Señor, Fuerte, Roca, etc, eran decisivos para entender la idea sobre Dios. En la primitiva comunidad cristiana de Jerusalén se llamó Señor a Jesús, después de su ascensión a los cielos, dando a esta palabra un sentido religioso. Así lo atestiguan los Hechos de los Apóstoles: 1. 21; 2. 36; 9. 14; 21; 22, etc. "Señor Jesús, re­cibe mi espíritu... Señor, no les imputes este pecado." (Hech. 7. 59) Para San Pablo, Kyrios implica "señor divino". Multiplica las alusiones a Jesús, incluso identifica los títulos bíblicos atri­buidos a Yaweh entre los judíos, que él los transpasa a Jesús: 1 Cor. 1. 31; Rom. 10.12; 2 Tes. 1. 9; Hebr. 1, 10; 1 Cor. 2. 16, etc. "Al nombre de Jesús se doble la rodilla cuanto hay en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra." (Filip. 12.10). "Porque, aunque algunos sean llamados dioses ya en el cielo ya en la tierra, de manera que haya mu­chos dioses y muchos señores, para nosotros no hay más que un Dios Padre, del que todo procede y para quien somos noso­tros; y sólo hay un solo Señor, Jesucris­to, por quien son todas las cosas y nosotros también." (1. Cor. 8.10) fuente: Enciclopedia Católica. Mercaba.org Catequesis Lasalle.

miércoles, 19 de octubre de 2022

¿PORQUÉ DIOS PERMITE QUE SUFRAN LAS PERSONAS BUENAS?AS BUENAS?

¿POR QUÉ DIOS PERMITE QUE SUFRAN LAS PERSONAS BUENAS? Todos conocemos a personas que están pasando por situaciones difíciles, ya sea por enfermedad, por perder un ser querido, problemas familiares, falta de empleo, de casa o sustento, que han sufrido en manos de la delincuencia o de injustica, etc. Sabemos que en muchas ocasiones esas personas que sufren son gente que no le hace daño a nadie, cuando les pasa algo es difícil entender y explicar por qué les suceden esas cosas, ¿por qué Dios permite que sufran? Y si vemos de forma más amplia muchos se preguntan si vale la pena ser buenos, entendiéndose por ser un buen ciudadano, un buen cristiano que cumple con sus obligaciones en su familia, en su sociedad y con su Iglesia, ¿acaso el ser bueno no cuenta? ¿Por qué a los delincuentes, a los malos, a los que son pecadores parece irles tan bien? Les platico algo que acabo de vivir estos días, fui al banco cerca de mi casa, al estacionar mi coche sobre la banqueta salude a Don Néstor, un viejecito que está en una silla de ruedas, le falta una pierna y tiene secuelas de un accidente vascular cerebral o embolia, él vende paletas de dulce para sostenerse, siempre que lo veo platicamos un rato le compro una paleta dejándole dinero de más y termina regalándome una paleta para mi esposa y para mis hijas, es una buena persona, pues bien les comentaba, hace unos días lo salude y le pregunte ¿Cómo está Don Néstor? él con voz quebrada en lágrimas me dijo “Estoy muy mal, una señora me acaba de robar todo mi dinero que tenía en mi cubetita”, traté de tranquilizarlo y me quedé con él platicando y viendo que se fuera calmando, le dejé algo de dinero y me fui de ahí con una rabia e impotencia de lo que habían hecho con un pobre ancianito que dignamente busca su sustento y que una mala persona no le importó nada y lo lastimo y le robó lo poco que tenía, a un viejecito , una persona con discapacidad que no tuvo la forma de defenderse ,una persona buena. Y pensé ¿Cómo es posible que ya no se respete ni siquiera a personas tan indefensas? La verdad me sentía con mucha frustración queriendo hacer algo, eso me hizo pensar mucho y acudir a quien me calma, me ayuda a ver con perspectiva todo lo que sucede y me hace ver el sentido de las cosas, así que me puse a platicar con Dios para pedirle por ese viejecito, pero también por esta sociedad y mundo moderno tan deshumanizado y falto de valores en los que ya no hay respeto ante nada y se pisotean los derechos de los más débiles e inocentes. Nuestra sociedad que en la búsqueda de poder, dinero y un hedonismo desbordado ha optado por excluir a Dios de sus vidas y como resultado vemos la gran crisis de valores y el tipo de personas que no les importa robar a un anciano, matar a un bebe inocente que aún no nace, pervertir a un niño con ideología de género o induciéndolos a la drogadicción, con familias que de facto no son sino la causa de esas personas faltas de valores, incluso en nuestra propia Iglesia donde se está dando traicionar la doctrina de Cristo y quienes deberían defenderla promueven herejías y modernismos en Sínodos o espacios que se supone son reservados para guiar al pueblo de Dios y no perderlo. Pero como Católicos, hijos de Dios ¿qué debemos pensar, hacer y creer de todo esto? Lo primero es entender que Dios no es el que nos ha puesto una trampa y quien nos causa males, achacarle a Dios lo malo que sucede en el mundo como enfermedades, guerras, y crisis de valores es desconocer realmente lo que es Dios para nosotros, dice la Sagrada Escritura “Dios no hizo la muerte ni se goza en la pérdida de los vivientes. Pues El creó todas las cosas para la existencia» (Sab 1, 13-14), recordemos que fue el hombre quien traicionó a Dios, y lo desobedeció, y que nuestros primeros padres fueron los que con su acto de desobediencia introdujeron en nuestras vidas y existencia todos los males, que anidaron en la vida del hombre como consecuencia de lo que hicieron Adán y Eva. La muerte , la enfermedad y los males son consecuencia de este acto primigenio de nuestros padres Adán y Eva, y detrás del todo pecado y desobediencia a Dios está el Maligno, es el verdadero enemigo, el acusador de nuestros hermanos y de nosotros mismos, que busca condenarnos para alejarnos eternamente de Dios el sumo bien. El hombre fue dotado de libre albedrío para que escogiera entre el bien y el mal, y esas decisiones y sus consecuencias es de lo que ahora nosotros vivimos y vemos que pasa, así será para cada uno de nosotros al momento de tomar una decisión que en nuestra libertad nos acerca o nos aparta de Dios. No sé si ustedes hayan leído el libro de Job en la Biblia, es maravilloso ver como Dios confía y actúa con amor a su siervo Job a pesar de las pruebas y de todo lo que ha sufrido , la respuesta de Job siempre cautiva , “Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré allá, El Señor me lo dio , el Señor me lo quitó, bendito sea su santo nombre” (Job 1,21) Satanás como el acusador del hombre busca hacernos todo el mal posible y se vale de todo lo que sabe nos puede hacer renegar y apartarnos de Dios al creerlo como la causa del mal, sin embargo en nosotros mismos debemos buscar la forma de no alejarnos del sumo bien ,el acercarnos a Dios debe de prepararnos para la lucha y la prueba, pues también nos enseña Cristo que “Si alguno quiere seguirme niéguese a sí mismo que tome su cruz y me siga” (Mt 16,24; Lc 9,23) Por experiencias previas en mi vida que supongo la mayoría de nosotros ha pasado, siempre que hay un problema tratamos de solucionarlo, resolverlo de la mejor forma lo que nos pasa, pero en muchas ocasiones eso no es tan simple o incluso no es posible, cuando nos rodea la enfermedad, los fracasos, los problemas, incluso la muerte de nuestros seres más queridos y cercanos creemos que se acaba el mundo y que no tiene sentido nada Buscar la solución y la respuesta no es sencillo, pero debemos centrarnos en el verdadero origen y solución de los problemas, debemos acudir a Dios quien sabemos es la fuente de todo bien, quien le puede dar sentido a todo eso que padecemos, podemos pensar que no merecemos sufrir, que es un encarnizamiento con nuestra vida y un sinfín de pensamientos e ideas que nos llenan de angustia, pero que en lugar de explicar el mal, nos alejamos de quien puede levantarnos y darle sentido a todo. Cuando nos centramos en nosotros, en nuestra humanidad podemos simplemente desesperar hundiéndonos en el pesimismo y en la angustia pues al centrarnos en nosotros, creyéndonos el centro del mundo, se nos olvida que somos simples granos de arena en el basto universo, que nosotros no lo hicimos, que no controlamos realmente aspectos tan esenciales de nuestra vida como nuestra salud o la existencia misma, eso pasa cuando sacamos de la ecuación de nuestro mundo a Dios. Otra de las cosas que suceden es que siempre vemos la connotación negativa de los males y no vemos que son oportunidad de santificación , si asociamos a Dios nuestros problemas, si junto con él tomamos nuestra cruz y nos abandonamos a su voluntad, entonces todo tiene sentido , el poder ver que en el mismo mal que sufrimos Dios nos llena de su gracia y fortaleza, quizá sea para nuestra propia santificación, quizá sea para reparación de tanto que ofende el mundo al Señor, quizá sea para purificar nuestros pecados y acciones en vida , ya sea por nosotros o por los demás debemos ofrecerlo a Dios quien siempre acepta un corazón contrito y arrepentido y le da las gracias necesarias para no perderse. Dios es el origen de todo, nuestro Padre y creador, y al mismo tiempo es la fuente del sumo bien, si queremos sanar, sentirnos seguros y felices ¿Qué debemos hacer? Pues acudir a quien sí tiene el poder de cambiar nuestras vidas y darles sentido pleno a nuestra existencia. Otra cosa que sirve es ver en perspectiva que los males, tropiezos que suceden pueden ser un camino de santidad, o quizá una forma de la cual el Señor se vale para santificarnos y perfeccionarnos, pero ¿cuantos realmente ofrecen sus penas y sufrimientos por Dios y por los demás? Se nos olvida lo que dice la Palabra de Dios, “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo tome su cruz y sígame”, no dejemos pasar y desaprovechar eso que nos lastima, nos causa angustia, pues recordemos que, como dice el Salmista, “un corazón contrito y humillado tu no lo desprecias Señor” (Sal 51,19). Estamos llamados a ser luz del mundo y sal de la tierra, no nos extrañe persecuciones, problemas, traiciones, guerra total contra nosotros los hijos de Dios, estamos llamados a la batalla, nuestras vidas y almas dependen de ello , más aún la vida de nuestros hermanos están en juego, la salvación de todos, si no acudimos y nos entregamos totalmente al Señor de la vida y de la gracia, entonces nada tiene sentido, nuestro sello al ser hijos de Dios y soldados de Cristo es que tendremos que luchar contra el mundo esperando la gracia de que el Señor Dios nos vea con ojos de misericordia. Cuando alguien desespere por problemas, cuando veamos sufrir a personas buenas es una oportunidad de acompañar, reconfortar, dar consejo y esperanza, guiar y ser luz para esas personas en la oscuridad, dar testimonio que aun en las peores situaciones no estamos solos y que Dios nos da las fuerzas para salir adelante y que nunca nos da algo superior a nuestras fuerzas, y si lo tenemos a Él nada nos impedirá llegar a la gloria eterna. Retomando el libro de Job una frase que me recuerda, me sirve para enfrentar las adversidades que tiene la vida del hombre “Militia est vita hominis super terram, et sicut dies mercenarii dies ejus.” (Job 7,1), “Milicia es la vida del hombre sobre la tierra, y como días de mercenario son sus días”, cada día es una batalla, cada día es luchar por nuestro Dios, las pruebas ,los males son ese campo de batalla y el Señor de los ejércitos les da esas batallas a sus mejores guerreros y nunca los deja solos, no desesperemos en nuestro amor a Dios y al prójimo rechacemos todo mal, todo pecado de nuestro corazón, lo peor apenas viene, pero estemos en gracia y preparados a dar el buen combate, recordemos siempre que Cristo nos dice algo contundente “Yo he vencido al mundo”(Jn 16,33) estamos del lado vencedor aunque parezca que el mundo y el maligno van ganando , solo se resisten a su derrota, pero no prevalecerán. Laus Deo Virginique Matri.

¿PODEMOS ACEPTAR LA EUTANASIA DE UN SER QUERIDO?

¿PODEMOS ACEPTAR LA EUTANASIA DE UN SER QUERIDO? No puedo dejar de comentar algo que es noticia mundial sobre la muerte, diría más bien asesinato de Vincent Lambert , a quien le fueron negados sus derechos a un trato y cuidados dignos dada su condición de persona y paciente enfermo , literalmente se le dejó morir de hambre por la decisión de médicos apoyados en tribunales de Francia. Esto es realmente muy triste desde cualquier punto de vista, se les niega al paciente y sus familiares los cuidados para la preservación de la vida, no es el único caso, pero si el que ha sido más reciente y mediático. A los médicos se nos enseña a salvar vidas no a quitarlas, y cuando tenemos un paciente grave, con complicaciones o incluso en fase terminal de alguna enfermedad tratamos de usar nuestro conocimiento y las medidas necesarias para que el paciente tenga todos los cuidados y atenciones médicas necesarias para 1° Preservar su vida y sus funciones vitales autónomas hasta su deceso por causas naturales 2° No realizar un "Encarnizamiento terapéutico" que es abusar de tratamientos y medidas que prolonguen innecesariamente la vida sin que sea posible evitar el deceso natural de la persona y si aumentando su sufrimiento 3° los cuidados ordinarios para mantener una buena "calidad de vida" no pueden ser legítimamente interrumpidos, como es darles alimentos, bebidas que preserven sus funciones vitales, cuidados elementales de higiene, uso de medicamentos que calmen el dolor o la angustia y sobre todo no tomar medidas que aceleren, prolonguen sufrimiento o interrumpan la vida del paciente. En mi trabajo continuamente me veo obligado a dar informes a los familiares sobre el estado de salud, en ocasiones es sobre el deceso de sus seres queridos, ya sea porque sufrió una complicación y la persona no reaccionó a las medidas que la ciencia médica dispone y llega el término de la vida. En otros casos es porque los familiares o el mismo paciente ya no aceptan que se realicen medidas extraordinarias para prolongar la vida y el sufrimiento del enfermo, lo cual es moralmente aceptable y no contraviene la doctrina cristiana si se permite el curso natural de la enfermedad sin hacer uso de medidas de dudoso resultado o incluso experimentales, no se puede bajo ninguna circunstancia provocar la muerte, pero se acepta no poder impedirla, y por ello el paciente o sus familiares cuando él ya no puede tomar decisiones tienen los derechos legales, respetando siempre la voluntad razonable y los intereses legítimos del paciente. No es algo fácil, pero debemos guiarnos por un sentido de honestidad y ética profesional los que somos médicos o profesionales de la salud, y también como creyentes tener delicadeza y tacto para dar respuestas a quienes sufren y en su caso dar la noticia del fallecimiento, si bien no podemos detener el trance doloroso de la muerte para un ser querido, siempre podemos darle el sentido cristiano y la trascendencia de la vida de las personas que han sido llamadas a cuentas con nuestro Creador. Me ha tocado en ya muchos años de ejercer la medicina personas que toman de diferentes maneras el anuncio de la pérdida de su ser querido, desde la incredulidad, la negación, la ira, el llanto incontenible y la tristeza desgarradora, hasta quienes lo toman con tranquilidad y resignación cuando uno les informa la muerte de un familiar, algunos expresan palabras de enojo, otros de resignación, frustración, tristeza, algunos de liberación o agradecimiento por que ya no padecen sus enfermos. El estar frente a la muerte le da sentido a nuestra propia vida y nos enseña a valorarla, pero los creyentes debemos ir más allá, pues sabemos que la muerte es el destino común y final de todo hombre para presentarse al juicio delante de Nuestro Señor Dios, y con la esperanza de que tenga misericordia de los que mueren y de nuestra propia vida. El tema de la Eutanasia, que es un eufemismo para describir el asesinato de una persona que por su edad o discapacidad se cree que ya no es útil a la sociedad es algo que los cristianos debemos rechazar rotundamente, primero porque uno de los Mandamientos de la ley de Dios así lo dice “NO MATARÁS”, el quinto Mandamiento nos lo recuerda, como también la doctrina católica que a muchos se les ha olvidado. El Catecismo de la Iglesia Católica nos dice claramente en su numeral #2277 “Cualesquiera que sean los motivos y los medios, la eutanasia directa consiste en poner fin a la vida de personas disminuidas, enfermas o moribundas. Es moralmente inaceptable. Por tanto, una acción o una omisión que, de suyo o en la intención, provoca la muerte para suprimir el dolor, constituye un homicidio gravemente contrario a la dignidad de la persona humana y al respeto del Dios vivo, su Creador. El error de juicio en el que se puede haber caído de buena fe no cambia la naturaleza de este acto homicida, que se ha de rechazar y excluir siempre (cf. Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Iura et bona)”.(1) Así pues no encontramos en la disyuntiva con pacientes como Vincent Lambert en el que su dignidad y derechos como ser humano fueron ignorados, lo que provocó su muerte, pero fue decisión de tribunales, médicos y algunos familiares que aceptaron la eutanasia en este caso. Por eso es importante conocer lo que enseña nuestra Iglesia, ya el Papa Benedicto XVI en su momento por medio de la Congregación para la doctrina de la fe respondía algunas preguntas que siempre vale la pena retomar en una carta respondiendo a preguntas de la Conferencia Episcopal Estadounidense sobre la hidratación y alimentación de enfermos, como es el caso de Vincent Lambert, leamos lo que dice: “Primera pregunta: ¿Es moralmente obligatorio suministrar alimento y agua (por vías naturales o artificiales) al paciente en “estado vegetativo”, a menos que estos alimentos no puedan ser asimilados por el cuerpo del paciente o no se le puedan suministrar sin causar una notable molestia física? Respuesta: Sí. Suministrar alimento y agua, incluso por vía artificial, es, en principio, un medio ordinario y proporcionado para la conservación de la vida. Por lo tanto es obligatorio en la medida y mientras se demuestre que cumple su propia finalidad, que consiste en procurar la hidratación y la nutrición del paciente. De ese modo se evita el sufrimiento y la muerte derivados de la inanición y la deshidratación. Segunda pregunta: ¿Si la nutrición y la hidratación se suministran por vías artificiales a un paciente en “estado vegetativo permanente”, pueden ser interrumpidos cuando los médicos competentes juzgan con certeza moral que el paciente jamás recuperará la consciencia? Respuesta: No. Un paciente en “estado vegetativo permanente” es una persona, con su dignidad humana fundamental, por lo cual se le deben los cuidados ordinarios y proporcionados que incluyen, en principio, la suministración de agua y alimentos, incluso por vías artificiales. El Sumo Pontífice Benedicto XVI, en la audiencia concedida al infrascrito Cardenal Prefecto, ha aprobado las presentes Respuestas, decididas en la Sesión Ordinaria de la Congregación, y ha ordenado que sean publicadas.(2) El Catecismo nos lo dice # 2279 Aunque la muerte se considere inminente, los cuidados ordinarios debidos a una persona enferma no pueden ser legítimamente interrumpidos. El uso de analgésicos para aliviar los sufrimientos del moribundo, incluso con riesgo de abreviar sus días, puede ser moralmente conforme a la dignidad humana si la muerte no es pretendida, ni como fin ni como medio, sino solamente prevista y tolerada como inevitable. Los cuidados paliativos constituyen una forma privilegiada de la caridad desinteresada. Por esta razón deben ser alentados. (1) Así pues como Médicos Católicos cabe plantearnos el que debemos defender la vida desde su concepción hasta su fin natural, que no podemos hacer uso de nuestros conocimientos y pericias para detener la vida de ninguna persona mucho menos de nuestros pacientes, que debemos ser objetores de conciencia frente a casos en que el aborto, la eutanasia y la eugenesia pretenden ser vistos como algo bueno, noble y humano, cuando solo es el rostro de un relativismo y la mal entendida “autodeterminación” que en palabras de Juan Manuel de Prada “son consecuencia de un personalismo que se convierte en un valor absoluto desde el punto de vista moral, con independencia de la naturaleza de sus acciones y le permite expulsar de su vida el sufrimiento , o si no puede hacerlo naturaleza del hombre es la «libertad del querer»; o sea, la voluntad soberana imponiéndose sobre la naturaleza de las, expulsar del sufrimiento su vida, matándose exigiendo que otros le maten”(3). Por eso nos dice el Catecismo #2289 La moral exige el respeto de la vida corporal, pero no hace de ella un valor absoluto. Se opone a una concepción neopagana que tiende a promover el culto del cuerpo, a sacrificar todo a él, a idolatrar la perfección física y el éxito deportivo. Semejante concepción, por la selección que opera entre los fuertes y los débiles, puede conducir a la perversión de las relaciones humanas. No podemos aceptar que los conocimientos que adquirimos para salvar vidas se usen para lo contrario, daremos cuentas a Dios de nuestros actos. Acompañar al enfermo y a sus familiares en estos momentos es necesario de nuestra parte ya sea como profesionistas, pero más aún en calidad de Cristianos que debemos conformar nuestra voluntad y deseos a los de Dios Nuestro Señor, donde no podemos actuar como médicos siempre podemos actuar como hermanos que acompañan en este trance a su prójimo podemos dar palabras de consuelo y esperanza en la vida eterna que Cristo nos ha ganado al precio de su sangre. LAUS DEO VIRGINIQUE MATRI Manuel Cuevas Miles Christi. (1) Catecismo de la Iglesia Católica (2) http://www.vatican.va/roman_curia/congregations/cfaith/documents/rc_con_cfaith_doc_20070801_risposte-usa_sp.html (3) JUAN MANUEL DE PRADA (ABC 15-07-19) “Muerte digna”