YO CRISTERO

YO CRISTERO

Bandera Cristera.

Mi nombre es Manuel y soy Cristero,nací en el Bajío, en Valle de Santiago Guanajuato, pegadito a Michoacán, de ahí  es mi familia paterna, la familia de mi mamá es de Zacatecas y me encanta ir a visitarlos,bueno a mí me  bautizó en la Parroquia el sr. Cura Ortega un buen sacerdote que nos ayuda mucho y regaña de vez en cuando. Como el resto de mi familia y amigos somos campesinos y comerciantes, desde niños nos han enseñado el amor a Dios y a la Santísima Virgen,mi abuela que vive en Valparaiso cuando niño me llevaba a visitar al “Santísimo “ y me decía que estábamos delante del Rey de reyes y que todo lo que pidiera  y le dijera siempre sería escuchado, me repetía lo que también me decían mis papás y mi familia completa “A Dios y a tu fe católica debes defenderlos a capa y espada” así es que comprenderán que para nosotros vivir nuestra fe sencilla forma parte de nuestra vida, de quienes somos ,de quienes venimos y de lo que dejaremos a nuestros hijos.

¿Qué como me hice Cristero? Buena pregunta, sucedió así, habían  ya pasado años de la Revolución, muchos de los que se fueron a la “Bola”  eran oportunistas,pero también enemigos de Dios y de su Iglesia, ya sabíamos que al ganar Obregón y sus achichincles a los creyentes no nos esperaba nada bueno, y así fue, pero el que fue terrible fue Plutarco E. Calles, un general norteño con un odio a la Iglesia que empezó a perseguir a Curas, monjas y creyentes y pues contaba con todos los “pelones” del ejercito triunfador, tenía todo a su favor,políticos a modo, grupos anticlericales y el ejercito , así que un día a este señor ya como presidente de México se le ocurre promulgar una ley que restringía las manifestaciones religiosas y reprimir a los Sacerdotes, cerrar conventos .

Un día llegó al pueblo un batallón de “pelones” como les decíamos a los soldados y  entraron a la Parroquia y al señor Cura y a otro Padre los ataron y golpearon,  con lujo de violencia les rebanaron las manos con machetes y los golpeaban con  varas de membrillo llenando su cuerpo de verdugones, al Padre Mateo lo colgaron del campanario y se entretenían  diciendo que erá el nuevo campanero, al Padre Ortega  lo fusilaron en el atrio, a un costado de la Parroquia, y  el Coronel  Ampudia que los dirigía decía que eran ordenes del “supremo gobierno” y que se ching… por que así le harían a todos los curas,todos los que vivíamos cerca observamos en silencio y con una sentimiento de indignación por ver a dos Padres buenos ser torturados y asesinados tan brutalmente, además que profanaron la Iglesia con balazos,quemaron las bancas, pisotearon los ornamentos, y afortunadamente al Santísimo se lo llevó una de las hermanitas de la Adoración Perpetua, que si no lo hubieran también profanado. Todo eso nos causó tal malestar que nos reunimos  varios amigos y primos, decidimos hacer algo, el destacamento de soldados eran como una veintena, así que planeamos  quitarles armas, y caballos.

Ya de noche como siempre se emborrachaban, solo dejaban un par de centinelas, fácilmente los sometimos, eramos  8, tres de mis primos y cuatro amigos, ya adentro del cuartel que era nuestra antigua escuela, sabíamos donde guardaban las armas, fuimos tomando lo que se podía  y uno por uno en la oscuridad de la noche,amarrábamos y les tapábamos la boca a los pelones  hasta que los dominamos a todos.

Al Coronel ampudia le tocó al último, solo se le ocurrió a mi primo Raúl tocar la puerta de su cuarto y decir “Mi Coronel, aviso urgente del General Zarza de Irapuato” y salió como chinampina, luego luego lo encañonamos, Ahh como teníamos ganas de sorrajarle unos plomazos,pero nosotros no buscábamos venganza, sino justicia y eso, se lo dejamos a Dios, eso si reconozco que le dí un buen trancazo con la culata del Mauser y pues que Dios me perdone.

Una vez que se supo lo que hicimos en el pueblo todo mundo salió y parecía fiesta,pero Don Melitón , un viejo del pueblo, nos dijo: “Muchachos jalelenle para el monte  por que en cuanto se enteren los del gobierno irán tras de ustedes”, dicho y hecho, nunca falta un traidor y agachón que corrió a Irapuato a la zona militar y pues nosotros ya habíamos salido rumbo a la Cañada de Caracheo, por el Cerro del Culiacán, ahí  sabíamos que estaba un grupo de “Cristeros” como nos decían los pelones a quienes defendíamos a Dios y nuestra fe, ahí nos recibieron contentos porque llevábamos armas y parque que escaseaba, desde lo alto de la cañada vimos como un contingente de unos 100 soldados avanzaba , nosotros en total  éramos como 30 dirigidos por Dn Pedro Barajas de Salvatierra, y nos dijo “Muchachos peleamos por nuestro Dios, ¡VIVA CRISTO REY ¡ Y ¡ VIVA SANTA MARÍA  DE GUADALUPE! , así que vamos a darles una muestra de lo que es amar a Dios, no lleven temor ni odio en  su corazón, son nuestros hermanos, pero ánimo, no teman seguimos a Dios y seguro triunfaremos, y dicho y hecho,  tumbamos a todos los pelones, así que pusieron precio a nuestras cabezas y andábamos a salto de mata, de ahí rodeamos la laguna de Yuriria, subimos al Cerro del tule y bajamos por la sierra a Michoacán, como nuestro contingente iba sumando personas de pueblos y rancherías, llegamos a ser unos 70, armados con machetes, resorteras, fusiles de chispa, y unos 15 rifles y una docena de pistolas, pero cada que enfrentábamos al enemigo sumábamos armas,pero siempre faltaba parque y comida, sufrimos mucha hambre, pero eramos re buenos para cazar conejos y al menos un taco alcanzaba para todos.

En algunas ciudades como Morelia,  , Uriangato, Zamora los de la Liga para la defensa de la fe Católica nos conseguían parque,pero  era escaso y ni los gringos querían vender pues favorecían al gobierno Callista.

 En fin , llegamos a Jalisco con el Padre José Vargas que era general en el Ejercito Cristero y nos preparamos para combatir en Tepatitlan a un ejercito de 4 a 5,000 pelones al mando del General Cedillo un demonio hecho hombre, un día antes nos confesamos y comulgamos y en la Sant Misa nuestros corazones vibraban de amor a Cristo Rey dispuestos para la lucha,ahí en Tepatitlan  les dimos batalla y les ganamos,desgraciadamente mataron al Padre Vargas de un balazo en la cabeza.

Luego con mis primos nos fuimos a Valparaiso Zacatecas,pues teníamos pendientes de mis abuelos maternos y por que allá se estaban poniendo duras las cosas según nos llegaron noticias,habían matado al Padre Mateo Correa ,amigo y confesor de mis abuelos, en fin que el gobierno apretaba las tuercas en todas partes para acabarnos, luchamos con  muchas escaramuzas de federales y siempre salían corriendo a pesar de ser más que nosotros , en vísperas de navidad fuimos a Fresnillo a visitar al Santo Niño, mi mamá nació ahí, y le pedí la gracia de perseverar en su amor y gracia ,pasara lo que pasara y pues al parecer me oyó,porque el mero día 24 de diciembre nos agarraron los federales saliendo de la Hacienda de Trujillo, todo un regimiento para  20 Cristeros, luchamos hasta que se nos acabó el parque y nos hecharon montón y nos llevaron a Fresnillo y  luego a la capital a Zacatecas,pero en Calera de Rosales nos dijo un pelón “ahora si hijos de su ching… ya se los cargó la tía de las muchachas por que mañana nos los quebramos” y con una risa brutal nos golpeaba hasta que se cansó.

Son las 3 de la mañana, oímos todo lo que dice la tropa de soldados, están felices por habernos capturado, nosotros estamos tranquilos, hemos rezado el Rosario y nos disponemos a bien morir, perdonamos a los que nos van a fusilar y pedimos perdón a Dios por lo mal que hayamos hecho, como nos enseñó el Padre Ortega hacemos un acto de contrición perfecta, y como última voluntad nos dejan escribir una carta, esta misma que les estoy escribiendo a mis padres, para que no sufran y sepan que nos comportamos como verdaderos Cristianos y como hombres.

Ya clarea el sol, la oscuridad cede, nos forman en  fila frente a una pared de adobe, , se oye el redoble de los tambores, los soldados se burlan de nosotros y nos insultan, nos dicen “¿Dónde esta tu Dios?” nosotros sabemos que está ahí con nosotros y empezamos a cantar

“Que viva mi Cristo que viva mi Rey, que impere doquiera triunfante su ley…” y todos los soldados  se quedan callados y luego a culatazos de rifle nos tiran y golpean para que nos callemos, nos amarran a unas estacas y  se forma el pelotón de fusilamiento, volteo a ver a mis primos y amigos y les digo ¡ANIMO HERMANOS, HEMOS COMBATIDO EL BUEN COMBATE, VIVA CRISTO RE……

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Estimado Dn Arturo, me apena informarle que su hijo Manuel y otros 7 muchachos de su pueblo han sido fusilados en Calera de Rosales Zacatecas, a mí también me tienen preso y me llevan al parecer a Guadalajara,pero como sacerdote me permitieron darles la bendición y los muchachos me entregaron esta carta que les adjunto , tengan por seguro que estos valientes muchachos han pagado con su sangre para que nuestra patria brille la luz de Cristo y sea semilla de santidad en nuestra nación tan agredida, termino enviándoles mis condolencias y repitiendo con ellos el grito que si bien callaron las balas no pudieron ahogarlas pues ahora seguro que en la gloria repiten ¡VIVA CRISTO REY,VIVA SANTA MARIA DE GUADALUPE,VIVA MÉXICO!, reciban mi aprecio y gratitud por haber criado a hijos así, suyo afectísimo en Cristo

Padre Agustín Caloca.